¿Valió la pena tirar 528 millones por caprichitos?

*Ante fracaso de consulta van por tribunal popular

*AMLO no ha hecho nada en tres años: Arzobispo

 

DURANTE MUCHOS años los mexicanos no fanatizados se preguntarán –aunque también los padres de niños con cáncer, pacientes con VIH/Sida y enfermos de otros males crónicos degenerativos- si valió la pena tirar a la basura 528 millones de pesos, solo para satisfacer un capricho presidencial como fue la fracasada Consulta Ciudadana que apenas tuvo una participación de entre 7.07 y 7.74 por ciento de los ciudadanos registrados en la lista nominal, muy lejos del  40 por ciento para llevar a juicio a los actores políticos del pasado, algo que por lo visto ya solo le interesa al Presidente Andrés Manuel López Obrador que, no obstante los llamados diarios que hizo a participar, esta vez hasta los beneficiados con programas sociales le dieron la espalda, aunque López Obrador es como Jalisco: que cuando pierde arrebata, y en ese tenor ya aceleró a varias organizaciones sociales, sobre todo a promotores de la consulta a la creación de un tribunal de los pueblos, similar a los que se han conformado para indagar casos como la guerra de Vietnam o la dictadura chilena, esto con la finalidad de concretar mecanismos que lleven la justicia a las víctimas de crímenes perpetrados por el Estado que fueron encubiertas por las mismas autoridades en el pasado para mantenerse impunes. Los nuevos acelerines son encabezados por Ariadna Bahena y Omar García (sobreviviente de los hechos en los que desaparecieron los 43 normalistas de Ayotzinapa), y quienes se encargaron de recolectar las firmas que fundamentaron los requisitos legales para realizar la consulta; los activistas  convocaron a la población, organizaciones civiles y partidos políticos a reunirse el 8 de agosto a mediodía en el Zócalo de la Ciudad de México para presentar el plan de acción.

 

Y ESTO ya lo tenían previsto toda vez que la asistencia a las urnas, desde muy temprano del domingo fue muy escasa, en algunos casos inexistentes, aunque ahora dice que la creación de esa instancia la impulsaban, independientemente, de los resultados de la consulta ciudadana que consideraron un éxito pese a las acciones de la derecha que buscaron minar e impedir su realización, lo cual a ciencia cierta no es verdad, aunque si esto fuera así, ellos, los morenos, tuvieron de vocero al mismísimo Presidente López Obrador que no hubo día sin que promoviera el ejercicio. Y es que según los impulsores del tribunal del pueblo, ante el fracaso rotundo de la consulta el proceso no debe terminar con ese ejercicio sino aterrizarse con mecanismos de justicia transicionales que permitan el derecho a la verdad, a la memoria de las víctimas, a coadyuvar con el sistema de justicia para una reparación de los daños, esclarecer los hechos y garantizar la no repetición. Sin embargo, pudieron ahorrarse 528 millones de pesos para la compra de medicamentos urgentes e, incluso, vacunas, si hubieran obviado la consulta y erigido directamente el tribunal popular para exigir justicia, pero decidieron seguirle al juego a un Presidente que no supera sus rencores acumulados durante tantos años, en tanto en su gabinete, en cargos importantes, tiene a Manuel Bartlett que fue quien le birló el primer triunfo a la izquierda con la afamada caída del sistema, o que decir de Alfonso Durazo y, muchos, muchísimos más.

 

ES MENESTER recordar uno de los primeros casos de una instancia de las características que proponen fue el llamado Tribunal Russell o Tribunal Internacional que analizó los crímenes de guerra en Vietnam, por lo que los activistas explican que el tribunal es complementario a la comisión de la verdad propuesta por actores políticos, ya que dicha comisión debe sesionar en privado apegado a las leyes locales, mientras que el tribunal permite un foro público para las víctimas y deriva en soluciones profundas con la participación de la ciudadanía.

 

LO CIERTO es que AMLO, a no ser por la palabrería de todos los días, no ha hecho gran cosa por los mexicanos, salvo los programas sociales a unos cuantos, sin embargo, las clases medias, empresarios e industriales siguen esperando grandes logros que no se vieron ni siquiera en plena pandemia, cuando el Presidente negó apoyo a ese sector para reactivar la economía, la que lograron sacar avante con mucho esfuerzo, aunque ahora el mandatario se acredite el logro, cuando actuó como los cangrejos que quieren salir del hoyo: agarrando de las patas a sus congéneres para impedirles alcanzar la libertad. Por ello, no en vano el señor Arzobispo de Xalapa, Hipólito Reyes Larios dijo el domingo que AMLO no ha hecho absolutamente nada, aunque aún está a tiempo de demostrarle en los próximos tres años al prelado que ya se puso a trabajar en serio, en vez de denostar a quienes no piensa como él, aunque queda claro que el pueblo no le paga para ello sino para trabajar en serio.

 

YA EL PRI y el PAN cuyos ex Presidentes, en caso de haber ganado la consulta el morenismo, habrían sido los más afectados, reiteraron que el pueblo puso en evidencia que la ley no se consulta, y en ese tenor, desperdiciar 528 millones de pesos en una consulta innecesaria es muestra de lo mal que están las prioridades de Morena y del gobierno federal. Por ello reiteran que los morenistas siguen sin entender que el país vive una crisis, aunque dejan en claro que tanto el PRI como el PAN están a favor de la participación ciudadana en la toma de decisiones, por ello expresan su respeto por quienes han decidido participar en la consulta, aunque lamentaron que el primer ejercicio de este tipo no tenga un propósito real, pues la ley no se consulta. Es muestra de lo mal que están ordenadas las prioridades de morena y del gobierno federal, por lo que, cada día más mexicanos se convencen de que Morena es una desgracia para México.

 

Y AUNQUE lo Morenos no cesan de echar la culpa al INE del fracaso, lo cierto es que sin presupuesto adicional, los consejeros hicieron lo que pudieron, y por ello Lorenzo Córdova, consejero presidente del Instituto Nacional Electoral, respondió a Citlali Hernández, secretaria general de Morena, quien acusó al INE de gastar más en comida que en poner las casillas para la Consulta Popular, que “discuta con datos”, y le dejó en claro que el INE logró sacar adelante ese ejercicio democrático pese a las descalificaciones y mentiras que se vienen construyendo desde hace semanas, “porque (a los morenistas) no les gusta que exista una autoridad autónoma e independiente”. Así de simple. OPINA [email protected]