Soy de nación campesino. Representación y memoria en el agrarismo veracruzano de Elissa J. Rashkin

La investigadora Elissa J. Rashkin  y la editorial de la Universidad Veracruzana, en vísperas del centenario de la fundación de la Liga de Comunidades Agrarias del Estado de Veracruz,  fundada en la ciudad de Xalapa, el 23 de marzo de 1923, hace 100 años. Una larga investigación sobre la liga de comunidades agrarias, convertida en una publicación con el título: Soy de nación campesino. Representación y memoria en el agrarismo veracruzano, Universidad Veracruzana. México, (2022)  246 páginas. Dicha obra se presentó el pasado viernes 17 de marzo del 2023; en el Centro Recreativo Xalapeño. https://youtu.be/NEjVhF8WQdQ

Elissa J. Rashkin, nacida en los Ángeles, California, Estados Unidos de Norteamérica en 1969. En los últimos 20 años avecindada en nuestro país. Para estas fechas ya se nacionalizó mexicana, una paisana veracruzana más, bienvenida. Investigadora del Centro de Estudios de la Cultura y la Comunicación, fundado por la Dra. Celia del Palacio en el año del 2009. Doctora por la Universidad de Iowa, U.S. integrante del sistema nacional de investigadores. Cuenta con una larga lista de artículos y libros publicados tanto en español como inglés. Títulos como: Atanasio D. Vázquez, fotógrafo de la posrevolución en Veracruz (2015). Mujeres cineastas en México: El otro cine (2015). Por citar también los artículos especializados también es grande su producción escrita.

La historia de la lucha por la tenencia de la tierra ha sido larga en la historia de la nación mexicana, ya desde las primeras décadas del siglo XVI, los pueblos originarios exigieron el respeto a la propiedad  comunal de la tierra, esa misma que Benito Juárez, (1806-1872) fomento que las tierras en modelo capitalista. En el siglo XX, con el movimiento armado convocado por  Francisco I Madero (1873-1913) quien sólo supo utilizar electoralmente la lucha agraria  de Emiliano Zapata (1879-1919). Fue Venustiano Carranza, (1869-1920) quien el 6 de enero de 1915, proclamó la Ley Agraria. En 1923, los campesinos veracruzanos, se organizaron en La Liga de comunidades agrarias del Estado de Veracruz, bajo el amparo del gobernador estatal, el ingeniero  Adalberto Tejeda Olivares, (1883-1960).

Soy de nación campesino. Representación y memoria en el agrarismo veracruzano, es una larga investigación que desarrolló la investigadora  Elissa J. Rashkin,  con un excelente trabajo de campo, como también de gabinete, analizando cada una de las propuestas bibliográficas que producido la lucha agraria de los mexicanos, en la posrevolución.

Una mirada nueva para los estudios del agrarismo en Veracruz, Rashki, con la historia social nos lleva a repensar  la lucha de los campesinos veracruzanos, bajo la guía de la Liga de comunidades Agrarias.  La obra está integrada por seis capítulos: Negociar en el poder. ¡ Un periódico campesino!. La Lucha, fiesta y oratura. Recordar no es velorio: testimonios agraristas. El agrarismo en la literatura regional. El agrarismo en tiempo de olvido.

El trabajo aquí comentado tiene muchas horas de revisión de archivos desde la Nación, como General del Estado de Veracruz. Así también de hemeroteca. Ya en la bibliografía, cada uno de los clásicos, como Vladimir Acosta Díaz (1989), Agetro Leafar (1942). Olivia Domínguez Pérez (1985). Romana Falcón (1977) Heather Fowler Salamini (1979)  Soledad García Morales (1986).  Alfonso Hernández Pérez (1980).Emilio Kouri (2015) Luisa Paré (1977).

Me llamó mucha la atención el capítulo sobre el ¡ Un periódico campesino¡. Una vez inaugurada  La Liga de comunidades agrarias del Estado de Veracruz, en el desaparecido Teatro Lerdo de Tejeda,  ubicado en las calles de Clavijero  y Altamirano.  Es Manuel Almanza García, (1885-1954) a quien deberíamos considerar como el ideólogo de la Liga,  quien promovió la edición de una publicación escrita para los veracruzanos, para ser una herramienta de propaganda de la lucha agraria. Con un campesinado analfabeta, eran los años de la promoción de la lectura desde la SEP, con su primer titular,  José Vasconcelos Calderón  (1883-1959), excandidato presidencial en 1929.  La voz del campesino fue un excelente ejercicio de comunicación para un sector de la población veracruzana, los campesinos, el problema fue la falta de cultura lectora, en una población que no sabía leer.

Otro de los capítulos  presentado por Elissa J. Rashkin, hace un exquisito análisis de la literatura regional, con los temas agrarios. Hace un análisis profundo de las siguientes  obras: La Hacienda (1924) de Xavier Icaza (1892-1969). Milpa, potrero y montes por Gregorio López y Fuentes (1887-1966).  Y  el xalapeño  Sergio Galindo Márquez, (1926-1993) con su novela  Otilia Rauda.

En lo particular la lectura me dejó un gran sabor de boca, por trabajar dos obras coordinadas por Olivia Domínguez Pérez,  quien hace un poco de más de 30 años fueron publicadas; en esos años era su becario en el antiguo Centro de Estudios Históricos de la Universidad Veracruzana, me refiero a las obras: Memorias: Un dirigente  agrario de Soledad de Doblado, en su colección rescate, Universidad Veracruzana (1992)  de Porfirio Pérez OlivaresAgraristas y Agrario, Gobierno del Estado de Veracruz, (1992) Fue mi primer acercamiento con los textos en la etapa de edición.

Que sólo la invitación para leerlo, una nueva visión de la lucha agraria en el estado de Veracruz, en el marco del centenario de la Liga de Comunidades Agrarias del Estado de Veracruz.