*En abierta “campaña” se erige en fiscal y exculpa a Harfuch
*Monreal insiste en no rajarse pero podría irse a la oposición
YA EN abierta campaña por la Presidencia de la República, visitando los fines de semana hasta dos Estados, en este caso Oaxaca y Campeche, vanagloriándose de los resultados obtenidos por su Administración en la ciudad de México y ensalzando al Presidente Andrés Manuel López Obrador por el apoyo que dispensa a las mujeres, Claudia Sheinbaum Pardo –invariablemente, con línea del mandatario nacional- disfraza sus giras frente a funcionarios, líderes sindicales y simpatizantes de Moren como actividades académicas aunque, también, políticas, destacando la importancia del agua y de las féminas, aunque en la capital del País no solo se les asesine sino, también, se les reprime. Y como si no hubiera suficiente trabajo en la capital del País, la jefa de Gobierno se da el lujo de pasear por el centro histórico oaxaqueño acompañada del Gobernador electo, Salomón Jara posando para fotografías, mientras que en Campeche la Gobernadora Layda Sansores San Román le organizó un evento con más de 2 mil asistentes denominado “Políticas públicas exitosas en el Gobierno de la Ciudad de México”, en donde la jefa capitalina de plano se quitó lo que aún le quedaba de capucha, argumentando que destacando el trabajo de la cuarta transformación en favor de las mujeres: “¿Quién fue el primer Presidente que tuvo un gabinete paritario?, Andrés Manuel López Obrador, ¿Quién ha sido el único Presidente que tiene una mujer secretaria de Seguridad Pública y Protección Ciudadana?, ¿Quién ha sido el único Presidente que ha propuesto a una mujer para gobernar el Banco de México, que ha propuesto más mujeres para la Suprema Corte de Justicia de la Nación?”, cuestionó, y fue ahí donde se plano dijo: “las mujeres podemos ser ingenieras, podemos ser abogadas, podemos ser astronautas, podemos ser diputadas, podemos ser gobernadoras, podemos ser presidentas de la República”.
Y TAN segura y fortalecida se siente rumbo a la postulación que podría llevarla a Gobernar el País, que no dudó ni por un instante en dar su respaldo total y absoluto a Omar García Harfuch, Secretario de Seguridad Ciudadana, quien tras ser colocado al filo de la navaja como uno de los hacedores de la Verdad Histórica que dio carpetazo a la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa, dejó en claro que seguirá al frente de la dependencia, esto a pesar de que su nombre fue vinculado al caso de los desaparecidos durante la audiencia de imputación del exprocurador Jesús Murillo Karam, emulado acaso a AMLO que a su vez reproduce en los hechos la icónica frase de Luis XIV de Francia, El Rey Sol: “El Estado soy yo”, tópico político que se interpreta en el contexto de la monarquía absoluta.
POR ELLO, soslayando, incluso, las carpetas de investigación donde aparece su colaborador, Sheinbaum destacó que el secretario de la SSC ha dado su información, y “al frente de la Ciudad de México ha desempeñado un papel sumamente importante”. A la jefa de Gobierno no le queda claro que la ley es una cosa y las querencias otras, y que si Omar García está en una carpeta de investigación, lo prudente es que se presente a declarar en caso de ser llamado, y que sea la autoridad judicial la que determine lo conducente y no ella, por más que ya se sienta la sucesora de AMLO. Y si bien el secretario de Seguridad, también, rechaza la versión de haber participado en una reunión “para fraguar la verdad histórica” en el caso Ayotzinapa, no es, tampoco, este quien dirá la última palabra, por más que Sheinbaum lo respalde y diga que es un hombre íntegro por lo que se quedará al frente de la dependencia. Y es que la versión de las reuniones se desprende del testimonio de Bernardo Cano Muñozcano, secretario particular de Tomás Zerón de Lucio, extitular de la Agencia de Investigación Criminal, refugiado en Israel, quien se convirtió en testigo colaborador de la FGR, y si lo dice es porque algo sabe.
EN ESE contexto sucesorio, al que no le calienta ni el sol aunque no por ello se amilana es el Senador y Presidente de la Junta de Coordinación Política del Senado, Ricardo Monreal Avila –como seguramente pasa lo mismo con el Secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard y, en menor medida con Adán Augusto López Hernández, titular de Gobernación que sabe de antemano que fue una especie de cuña entre la consentida de AMLO y el canciller-, y en ese tenor deja en claro: “ni nos vamos a dejar, ni nos vamos a rajar, pues asume que quiere ser el Presidente de la reconciliación.
MONREAL MANTIENE cierta rebeldía, pues sabe de antemano que su actitud podría redituarle el ofrecimiento de algún partido para disputar la Presidente, en ese caso Movimiento Ciudadano, y en el mejor de los casos, de una alianza opositora, y por ello, aunque sabe que no ira por MoReNa no ceja de meter presión, y en una reunión con simpatizantes el fin de semana les reiteró que quiere ganar a la buena la contienda interna de Morena, pues “ni nos vamos a dejar, ni nos vamos a rajar”. Lo que llama la atención es el respaldo que tiene en las delegaciones donde perdió MoReNa la elección intermedia, pues en el marco de los primeros diálogos legislativos y constitucionales con cientos de simpatizantes y militantes morenistas, además de líderes políticos y sociales, en Azcapotzalco reunió a más de 800 personajes representativas mientras que en Álvaro Obregón a un promedio de 900. Pero por si las dudas, insiste una y otra vez, a sabiendas del rencor vivo en que suele convertirse AMLO: “Nosotros no nos vamos a pelear nunca con el presidente, le tenemos respeto y aprecio, pero él va a cumplir su responsabilidad en dos años y quiero sucederlo, quiero ganar a la buena para ser el presidente de la reconciliación”, y en Azcapotzalco puso la primera piedra de lo que será “la construcción de un sueño colectivo rumbo a la presidencia para darle continuación al proyecto de transformación del país”.
QUEDA CLARO, por lo tanto, que ante la evidencia de que Claudia Sheinbaum será la candidata de MoReNa a la Presidencia de la República, conforme se acerquen los tiempos del “destape oficial”, muchas corcholatas comenzaran a rodar en busca de sus propias botellas, y no se descarta que, incluso, Marcelo Ebrard pudiera seguir los pasos de Ricardo Monreal si logran amarrar una alianza opositora lo suficientemente fuerte como para ganarle a la favorita de Palacio que, por lo visto, usará los fines de semana para seguir realizando una prematura campaña Presidencial, y al menos en Veracruz –donde dice gobernar otro consentido de AMLO- ya fueron colocados espectaculares con la leyenda: “Para que siga la transformación, Claudia va”, como viene ocurriendo en otras Entidades. (¿Y para eso quieren reformar la Ley Electoral?) Así las cosas. OPINA [email protected]