Ramos Alor no sólo debe renunciar. Es un crimen dejar que los niños con cáncer mueran teniendo los medicamentos y dejándolos caducar

Ramos Alor no sólo debe renunciar. Es un crimen dejar que los niños con cáncer mueran teniendo los medicamentos y dejándolos caducar

No puede ser tan simple como pedir la renuncia de Roberto Ramos Alor y dejar que el señor se regrese a Coatzacoalcos a administrar el congal del que salió. Lo que Roberto Ramos Alor hizo o dejó que ocurriera como secretario de Salud es un crimen. Mientras miles de niños sufrían por el cáncer, mientras decenas de niños morían por el cáncer, Ramos Alor tenía las bodegas llenas del medicamento que pudo aliviar su dolor, que pudo evitar decenas de muertes. La negligencia del secretario de Salud es un crimen de lesa humanidad. De acuerdo con la definición de Wikipedia, los crímenes de lesa humanidad son “aquellos delitos especialmente atroces y de carácter inhumano, que forman parte de un ataque generalizado o sistemático contra una población civil, cometidos para aplicar las políticas de un Estado o una organización”. Por supuesto, Ramos Alor no actuó solo. Él sólo era el pelele de un grupo comandado por Eleazar Guerrero, quien sigue haciendo negocios en el Sector Salud. Si el gobernador lanza el grito al cielo por la muerte de un manatí, ¿qué es lo que va a hacer en este caso que se dejó sufrir y morir a tantos niños con cáncer? Ramos Alor y sus secuaces deben terminar en la cárcel; en un estado donde imperé la justicia eso debería pasar. Pero en el gobierno de la Cuarta Transformación, eso no pasará.

En el México que protege a los delincuentes, asesinan a arquitecto en Perote; esperaba a su esposa y lo abatieron por resistirse al robo de su vehículo

En la comunidad La Gloria del municipio de Perote, fue asesinado el arquitecto Cuvier Aguilar Domínguez. De acuerdo con reportes periodísticos de la zona, el arquitecto esperaba en su camioneta a su esposa que trabaja en un jardín de niños de esa comunidad. Mientras esperaba fue abordado por unas personas armadas que le exigieron se bajara y les entregara la camioneta. Al resistirse al despojo las personas le dispararon quitándole la vida. El asalto fue poco después del mediodía por lo que quienes presenciaron el asalto llamaron a la policía, sin embrago nada se pudo hacer para detener a los agresores. En redes sociales el Dr. Rey Acosta, familiar de la víctima lamentó de esta manera la muerte de quien fuera su sobrino: “Con profunda pena me entero de la muerte de mi sobrino el arquitecto Cuvier Aguilar Dominguez de manos de unos delincuentes que por robarle seguramente su vehículo acabaron con su vida. Que fácil es arrancarle la vida a alguien en nuestro país, matar se ha convertido en una práctica común y parece que nos estamos acostumbrando a ello. Los niveles de inseguridad e impunidad en que vivimos son sorprendentes, pareciera ser que la vida no vale nada. Cuántos más, hombres y mujeres, tendrán que morir para que empecemos a reaccionar y hacer algo”. Mientras tanto las autoridades siguen diciendo que el combate al crimen es un éxito y que Veracruz es un estado seguro. Seguro para los delincuentes, pues ya ve lo que dijo el presidente López Obrador, que en su gobierno también se protege a estos delincuentes.

AMLO presume esfuerzo para abatir la inseguridad. Dice que diario se reúne de 6 a 7 am con su gente. 110 mil homicidas van; mejor que quédense durmiendo

El presidente de los “abrazos, no balazos”, el presidente que dice que su gobierno protege hasta a los delincuentes, el presidente que dice que la Ciudad de México es más segura que Nueva York, este presidente ahora asegura que como nunca su gobierno está combatiendo el problema de la inseguridad. ¿Cuál es su fórmula? Pues pararse muy de madrugada para reunirse con su gabinete de seguridad. Señaló el presidente en su conferencia mañanera: “Nunca se había visto que todos los días de seis a siete a de la mañana nos reuniremos el Presidente, el secretario de la Defensa, el de Marina, la de Seguridad, todos; nunca se había visto que se atendiera diariamente el problema de la violencia, de los asesinatos”. ¿Y cuál ha sido el resultado? Hasta el momento se han contabilizado 110 mil homicidios en lo que va del sexenio de López Obrador. De hecho, algunos medios señalan que “el promedio mensual de homicidios dolosos durante el gobierno de López Obrador ha incrementado en 40% respecto al sexenio anterior”. Esos son los resultados, la verdad, señor presidente, mejor quédese dormido hasta las 11: 00 de la mañana, así nos ahorra usted unas cuantas mentiras, unos cuantos dislates.

Armando Ortiz                                    Twitter: @aortiz52                             @lbajopalabra