Poliamor: cuando el corazón se transforma en “bodega”

*Declara Juez constitucional el matrimonio de más de dos

*Iglesia pondrá el grito en el cielo si ratifican sentencia

 

EN POZA Rica, ahí donde el alcalde Fernando Luis Remes Garza, mejor conocido como “El Pulpo”, apodo que le viene de cuando era beisbolista porque no se le iba una sola bola, pero que le fue ratificado ahora como munícipe, ya que suele agarrar las piernas a ciertas ediles, lo que le mantiene con una denuncia judicial y una orden de restricción de no acercarse a la regidora que no soportó los tentáculos del vetusto octópodo en una extremidad inferior, ocurren cosas extrañas, además de la incontrolable violencia y abusos policiacos a los que la sociedad pretende imponer un alto mediante manifestaciones y plantones. Y es que en el municipio petrolero, donde en Enero de 1970 ocurrió uno de los más trágicos accidentes de aviación en el que murieron 14 periodistas que cubrían la campaña presidencial de Luis Echeverría Álvarez, así como cuatro miembros de la tripulación, sobreviviendo solo el comunicador Jesús Kramsky Steinpreis, quien finalmente murió en Agosto de 2019 a los 71 años a causa de una encefalopatía relacionada con un hepatocarcinoma (un tipo de cáncer en el hígado). Pues bien, a pesar de que las relaciones poliamorosas representan actos inmorales e inaceptables para miles de personas, el pasado 19 de este mes un juzgado federal reconoció que son constitucionales, y con esa resolución del Juzgado Octavo de Distrito en materia de Amparo Civil Administrativo del Trabajo y de Juicios Federales en el estado de Puebla, se resolvió el juicio de amparo 1227/2020 promovido por tres pozaricenses con el que se reconocen como constitucionales las relaciones poliamorosas, es decir, aquellas que implican a más de dos personas, lo que seguramente será motivo de escándalo para ciertos grupos sociales. Y es que la “familia plural” conocida, también, como  relaciones poliamorosas suele tener poca validez legal en México, pese que decenas de activistas en favor de la comunidad LGBTTTQIA+ buscan que se tome en cuenta a la hora del matrimonio.

 

SI BIEN las relaciones poliamorosas no se encontraban reconocidas en nuestro País, ni mucho menos contempladas en la legislación civil Federal, grupos de abogados consideran que la resolución sentará un precedente, aun cuando instancias religiosas se han manifestado rechazando esa resolución, sobre todo porque aseguran que atenta contra la familia que es la base de la sociedad: “la poligamia siempre será un retroceso, nos espera un futuro de desorden total, hay que ver cuantas implicaciones traería”, señalan por su parte miembros de la iglesia católica. Y aunque en México socialmente existen personas que al mismo tiempo que tienen una relación legal como el matrimonio civil o concubinato, también, mantienen relaciones con otras personas, ya sean hombres o mujeres, el asunto es que ahora ya cuentan con un reconocimiento constitucional que les evitaría caer en la poligamia (como dice Javier López “Chabelo”: verdad cuates). Por lo pronto en el argumento de la sentencia, el titular del juzgado del distrito reconoce que no se puede discriminar a ninguna persona en razón de sus preferencias sexuales, entendiéndose esto que, si alguien opta (desde luego con el consenso de todos los involucrados) por tener una relación tanto de matrimonio como de concubinato que involucra a más de dos personas, el negarle esta posibilidad de limitarla en sus opciones de matrimonio o de concubinato es discriminatorio e inconstitucional. Y aunque el caso ya se resolvió en el estado de Puebla, ha sido atraído por la Suprema Corte de Justicia de la Nación, ya que un tribunal colegiado de circuito le pidió que la atrajera, por lo que se encuentra bajo estudio y pronto la SCJN se pronunciará al respecto, pues hay quienes aducen que se trata de una sentencia a favor de la depravación, a tal grado que la comparan con las ciudades bíblicas de Sodoma y Gomorra por estar a favor de la pérdida de la preservación de la familia y permitir uniones de más de dos personas.

 

AUN SE recuerda cuando a finales de 2018, el nombre de la actriz argentina Florencia Peña ocupó la titularidad de los encabezados de varios periódicos, por lo que tuvo que salir a aclarar una supuesta infidelidad por parte de su pareja, Ramiro Ponce de León, luego de que se difundieran audios de él manteniendo una conversación sexual con otra mujer. La actriz admitió que dichos audios eran verdaderos, y que si bien era todo consensuado, le dolió que se hicieran públicos: “Tenemos una relación consensuada y abierta donde ninguno hace nada que no haya sido charlado, no quiero escuchar detalles en un audio y él tampoco de los míos”, enfatizó. Se manejó entonces que Florencia Peña, con Ramiro Ponce, sostenía una relación poliamorosa, consensuada y abierta. Poco después, acudió al programa de TVAlmorzando con Mirtha Legrand, donde, tras informar a los telespectadores que “siempre es bueno repensarse”, concluyó sentenciando que “el amor puede ser de muchas maneras…hay que abrir la cabeza”.

 

SEGÚN EL escritor, Doctor y Maestro en Administración Pública y Licenciado en Derecho, Alejandro Anaya Huertas,  desde tiempos inmemoriales ha existido, con diferentes variantes esa forma de relación amorosa entre más de dos personas, de tal suerte que la práctica del poliamor es bastante anterior al nacimiento de esa palabra, y no es una relación basada en la poligamia. Tampoco se puede identificar con las relaciones extraconyugales o infidelidades. En ese sentido, el libertinaje y su forma estructurada, el intercambio, también difieren del concepto de poliamor, ya que a los poliamorosos, al no concebir que sus compañeros sean de su propiedad, no les suele gustar el término intercambio. Tampoco debe confundirse el poliamor con las situaciones convivenciales de ayuda mutua que regula el libro segundo del Código Civil de Cataluña (“Dos o más personas que conviven en una misma vivienda habitual y que comparten, sin contraprestación y con voluntad de permanencia y de ayuda mutua, los gastos comunes o el trabajo doméstico, o ambas cosas, constituyen una relación de convivencia de ayuda mutua, que se rige por los acuerdos que hayan estipulado o, en su defecto, por lo establecido por el presente título” (art. 240-1) No, el poliamor es la filosofía y la práctica de amar a varias personas simultáneamente, de forma no posesiva, honesta, responsable y ética. Se trata de elegir conscientemente con cuantas personas se quiere estar involucrado en lugar de aceptar las normas sociales que dictan amar a una sola persona a la vez.

 

EN POCAS palabras, describe el experto, el poliamor es un término general que sirve para integrar la tradicional relación multipareja, pero con un mayor sentido igualitario.

Sexualove o eromance son otras palabras que se han acuñado para describir este tipo de amor. Sus principios rectores son: lealtad; fidelidad; honestidad; confianza; respeto; dignidad; comunicación; negociación y la no posesividad. El mismo autor hace hincapié en que no todas las relaciones poliamorosas son iguales. Y un esbozo taxonómico digno de mérito, fue elaborado por la agrupación “Poliamor Xalapa”, que identifica, gráficamente, distintos tipos de relaciones:

1.-Monogámicas: monógama ideal; monógama realista; engaño o adulterio, y monogamia serial. 2.-Abiertas: relación a ojos cerrados; relación abierta, y poligamia tradicional. 3.-Poliamor: trieja; triángulo; polifidelidad; jerárquico; no jerárquico, swingers, y anarquía relacional. Como sea, la Iglesia Católica no está de acuerdo con la multiplicidad de amoríos, y solo reconoce el valor del matrimonio a través de un hombre y una mujer, y en caso de que la corte le dé para adelante al poliamor, la Santa Sede pondrá el grito en el cielo, aunque muchos brincarán de alegría. A ver qué pasa…OPINA [email protected]