Juan Antonio Valencia
Desde el inicio de la creación de la Comisión Estatal de Atención y Protección a Periodistas, (CEAPP) un órgano gubernamental creado por el ahora prófugo, Javier Duarte, supuestamente para proteger a los periodistas, hubo inconformidades porque no se tomó en cuenta precisamente a los propios periodistas.
Prácticamente se hizo un club con allegados a Duarte, con el señuelo de que no solo atenderían sino también protegerían a los periodistas. Sin embargo se logró en esos seis años, el número más alto de asesinatos cometidos en contra del gremio, ¡Diecinueve crímenes!.
Bajo ese señuelo de la “protección” en seis años, se derrocharon en sueldos estratosféricos, gastos de representación, viajes, cursos y otros simuladores, ciento veinte millones de pesos, a razón de veinte millones de pesos de presupuesto, aprobado por el Congreso.
El resultado fue ciento veinte millones de pesos tirados a la basura y diecinueve periodistas asesinados y nuevos ricos, ahora con abultadas chequeras.
Aunque se pidió por parte del gremio la desaparición de este membrete, que solo ha funcionado como una oficina en donde solo se llega a cobrar, después de los seis años, y en los cuatro meses que lleva vigente en el gobierno de Miguel Ángel Yunes Linares, no ha habido ninguna diferencia.
Ahora con diecisiete millones de pesos anuales aprobado por el Congreso, para sueldos, gastos de representación y algunos cursitos, la CEAPP sigue funcionando como cuando Javier Duarte era el gobernador.
Antes eran veinte millones; ahora diecisiete millones de pesos solo para ir a los velorios y sepelios a dar el pésame a los deudos de los periodistas asesinados, o visitarlos en el hospital al sufrir atentados, como ocurre hoy.
Es obvio y más que elocuente, que la CEEAP no tiene capacidad para dar atención, porque carece de abogados titulados y con experiencia jurídica como visitadores, como era el caso de los que operaban en todo el estado, en la Defensoría de los Periodistas, dirigida por el licenciado Gerardo Perdomo Cueto, por citar el más claro ejemplo; CEAPP, no puede proteger a nadie, porque carece de una estrategia o protocolo de protección definido, al igual que la fuerza pública que designa, a los que le han matado a los reporteros “bajo protección”. Su función pues, se sujeta a una falacia.
En teoría tiene departamento jurídico, pero todo es de oficina y escritorio, los reporteros que se ven amenazados, tienen que defenderse y denunciar acuerpados por sus propios compañeros, si piden atención por alguna amenaza solo reciben promesas y después evasivas, como en el más reciente caso de una compañera en la ciudad de Jáltipan que solicito la atención de la CEAPP y fue ignorada.
Esa es la CEAPP, una agencia de empleos en las que todos cobran pero nadie quiere dar atención, pero lo peor del caso es que a pesar de que es una de las ocurrencias que como herencia dejo Javier Duarte, el Congreso solo aprueba el presupuesto, que le solicita el gobernador Miguel Ángel Yunes, pero desconocen cuál es su función.
La CEAPP no fue creada para dar cursos, sino para atender a los periodistas, no para una agencia de colocaciones en nombre de los periodistas.
Un breve sondeo de opinión entre periodistas del sur y parte del centro y norte de Veracruz, nos da una idea de los que piensan en torno a esta agencia de colocaciones.
Al cuestionarles “Si creen necesaria la desaparición de la CEAPP, o que siga en funciones; ¿SI. o NO?”
Se pronunciaron por el no; Eucario Santos, Omar Vázquez Valencia, Luis Enrique Suarez, Yadira Castillo, Victoria Rasgado, Luis Alberto Ponce, Romana Ortega, Nadia Ivette Córdova, Eleuterio Espinoza, Ignacio Carvajal, Nadia Carrión, Pedro San Juan Tolentino, Yazmin Cruz Gallegos, Marco Antonio Aguirre, Eva Varona, Berenice Tepach, Juanita Guzmán, Roberto Morales Ayala, Irma Santander, Yadira Gutiérrez Mateos, César Imagen González y Luis Alberto Ruiz.
Quienes dijeron si; Eduardo Izquierdo, Juan Carlos Angulo, Armando Arriaga, Adelfo Fausto, Jorge Tolentino, Fernando Plascencia, César Valencia Prieto, Valentín Alor, Sofía Moreno, Lázaro Cruz, Lázaro García, Jorge Cáceres, José Antonio Peraza, Raúl Domínguez Pinto, Elizabeth Aviña, Oswaldo Antonio, Carmen Hernández, Mario Zepeda, Gregorio Antonio, Margarito Escudero, Javier Zea Salas, Aracely Shimabuko, Carlos Domínguez Alegría, José Luis Martínez, Octavio Contreras Valencia, Gabriel Gutiérrez, Juan Antonio Valencia, David Domínguez, Daniel Jesús Torres, Silvia Núñez, Isabel Gutiérrez, Abel Martínez, Carlos Viveros, Víctor Hugo Gómez Leonardo, José Domínguez Pinto, Ruby Valenzuela, Guillermo Gutiérrez Arias, Federico Alvarado, Fabián Santiago Hernández, Ignacio Lázaro Domínguez, José Luis Ortega Vidal, Luis Alberto Chávez, Jair Toribio, Liliana Corona Sayune, Raúl Medina, Martin Vázquez Cabrera, Roberto Sosa, Mireya Rodríguez Jara, Valentín Márquez, Álvaro Quino Mixtega, Ernesto Malpica, Artemio Hurtado, Pedro Cayetano, Carlos Guillermo García, Martin Ruiz Urbieta, Pablo Jair Ortega, José Ortiz Medina, Iván Calderón Flores, Nidia Sánchez Hernández, Ileana Cruz, Azalia Lavin López, Teresa Rosado Sosa, Florencia Basulto, Natalio Bernal, Cecilia Cervantes, Miguel Hernández, Elizabeth Castañeda, José Luis Velázquez, Martha Infanzón, Gerardo Islas, Azucena Rosado Sosa, Athalía Santiago, Nelly Gaor, Alejandro Martínez, Luvin Santos Martínez, Eliud Méndez Fernández, Raúl Martínez Alvarado, Tamara Soledad Corro, Gilberto López Chión y Jaime Flores Cornelio.
Otros no contestaron la solicitud, vía WhatsApp y Facebook. En opiniones alternas, expresaron; que se restructure; Que se bajen los sueldos; Que atiendan como lo anuncian; Que el presupuesto vaya a las escuelas para pago de servicios y evitar condiciones las inscripciones a los niños.
De la opinión de ciento veinte periodistas, solicitada a todos por “Reporteros Policiacos A.C.” casi el ochenta por ciento de los que si contestaron, demandan la desaparición de la Comisión Estatal de Atención y Protección a Periodistas, por considerar que no cumple con los preceptos para los que fue creado.