*Otro delator acusará a Peña para salvarse
*Emilio Zebadua y la ingratitud a ultranza
CON EL actual Gobierno Federal, México está encaminado a ser un País de “sapos” o delatores; de sujetos –hombres y mujeres- que infringen la ley, pero que son perdonados si denuncian a “peces más gordos” en la escala de mando, lo que convertirá a la justicia, a ese paso, en una ramera que se vende al mejor postor, mientras presuntos delincuentes, con solo abrir la boca y “cooperar” pueden evadir la acción de la justicia y gozar de lo pillado impunemente –o acaso devolviendo una parte de lo sustraído no, precisamente, a las arcas, sino a bolsillos subrepticios-. Y ese es el caso de Emilio Lozoya Austín que prometió delatar a todos; de llevarse entre las coces a sus antiguos compañeros de cuadra con tal de salvarse y salvar a su familia, siempre y cuando a cambio de delatar a quienes fueron sus superiores, los perdonen, pues ello permitirá a la Cuarta Transformación no aplicar la ley, como debería ser, sino usarlo a su favor en los procesos venideros, justificando como la corrupción lo abrazó todo, incluso los círculos más altos, discurso que agrada al pueblo bueno que quiere ver el estadio repleto de gladiadores desarmados perseguidos por los leones para iniciar el festín de sangre, mientras se carcajean con un bolillo duro en una mano y en otra un tarro de vino, aunque no tenga mayores opciones que vivir eso que se llama “pan y circo”, sin considerar que ahora como antes la inseguridad sigue en su máxima expresión, más ahora que en el pretérito; que los hospitales presenten severas carencias de medicamentos para combatir el cáncer o VIH, que el dengue cada vez esté peor, que los feminicidios sigan al alza y que los asesinatos, secuestros, extorsiones, robos y asaltos no tengan para cuando aminorar, en tanto el inútil ex secretario de seguridad y protección ciudadana, Arturo Durazo Montaño, sintiéndose el Cid Campeador ande en busca del siguiente cargo por haber abatido la criminalidad solo en su calenturienta mentecita.
PERO LOZOYA Austín no es el único sapo dispuesto a abrir la boca para empinar a quienes le brindaron confianza y trabajo con tal de salvarse y disfrutar el monto de lo hurtado; Emilio Zebadua, considerado mano derecha de Rosario Robles Berlanga en las secretarías de Desarrollo Social (Sedesol) y Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) es otro sapo, y en ese tenor solicitó a la FGR el criterio de oportunidad, es decir, ofreció dar detalles de la participación de su exjefa Rosario Robles y Enrique Peña Nieto en la red de presuntos desvíos para beneficiar al PRI. Y lo hará con tal cinismo, temeroso como suelen ser los pillos, cobardes y traidores, que empinaría incluso al más querido y cercano de sus familiares con tal de no pisar la cárcel pero, sobre todo, que no le quiten ni un solo centavo. Bien dice que la cobardía es la falta de ánimo y valor, y por ello se denomina cobarde a la persona que no afronta las situaciones que implican peligro a causa de sus miedos. Por ello Zebadúa se ofreció delatar a Enrique Peña Nieto y Rosario por desvíos al PRI, y en ese sentido será testigo protegido
DICEN LOS expertos que si despreciamos los actos generosos de los demás o no les agradecemos lo que hacen por nosotros, estamos siendo ingratos, pues la ingratitud es un sentimiento de indiferencia o desafección hacia los demás. Por ello Dante Alighieri, en su poema teológico La Divina Comedia, nos dice que los traidores o ingratos están en el más hondo de los nueve círculos que conforman el infierno. Y por ello le comenta a Virgilio que “Siempre se dice que existen dos pecados graves que puede cometer el ser humano: la Ingratitud y la Traición, y ambos pecados tienen como premio el ultimo círculo del infierno, donde los restantes círculos, ocho en total, que están encima, y no les dejan salir a la superficie por los siglos de los siglos”
DANTE, EL protagonista de la obra, llega a una edad en la que se encuentra en una crisis, y debido a ello decide viajar al inframundo o infierno. En la primera etapa del viaje es acompañado por Virgilio, autor de La Eneida, un poeta precristiano a quien Dante admiraba, quien decide acompañarlo en su descenso hacia el infierno, y luego hacia el purgatorio. Pero Dante cuenta con la compañía de Virgilio solo hasta el purgatorio, como precristiano, es pagano, por lo tanto no accede al paraíso. Así Dante nos describe el Infierno como nueve círculos que van hacia abajo, en los que son sometidos a castigo los condenados, según la gravedad de los pecados cometidos en vida. Dante encuentra en el Infierno a muchos personajes antiguos, pero también de su época, y cada uno de ellos narra su historia brevemente a cambio de que Dante prometa mantener vivo su recuerdo en el mundo; cada castigo se ajusta a la naturaleza de su falta y se repite eternamente. Se destacan en esta etapa el tránsito por el bosque de los suicidas, la travesía del desierto donde llueve el fuego y la llanura de hielo de los traidores, estos últimos, considerados los peores pecadores entre todos.
EN ESE contexto, Emilio Zebadúa González, ex Oficial Mayor de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) y de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) ofreció convertirse en testigo protegido y delatar las operaciones de desvíos de recursos en donde participaron el expresidente Enrique Peña Nieto y su exjefa Rosario Robles Berlanga. Por ello hace unos días el exfuncionario acudió a la Fiscalía General de la República (FGR) para solicitar el criterio de oportunidad, donde ofreció revelar que Robles Berlanga, presa desde Agosto de 2019 acusada de participar en una red de corrupción de presuntos desvíos, fue quien le dio indicaciones para operar los contratos de las dos dependencias federales.
EL DIARIO Reforma publicó este lunes que Zebadúa cuenta con información que relaciona al expresidente Peña Nieto con esa red de desvíos, conocida como ”Estafa Maestra”, y está dispuesto a exponer, en el momento en que le sea requerida por el Ministerio Público Federal. En ese sentido, podría dar detalles de que los recursos desviados de la Sedatu y la Sedesol fueron usados para financiar las campañas del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en casi todos los estados, esto a pesar de ser el consentido de Rosario Robles con un sueldo total bruto de 189 mil 944 pesos mensuales. Como funcionario contaba con un seguro institucional de retiro, de gastos médicos y de separación. Entre sus prestaciones están la paga de defunción, la ayuda para despensa, asignación de vehículo y asistencia legal, de acuerdo con una revisión hecha en 2018 al Portal de Obligaciones de Transparencia (POT).
EN DERECHO la traición se refiere al conjunto de crímenes que engloban los actos más extremos en contra de un País, y familiarmente consiste en defraudar a la familia, amigos, grupo étnico, religión u otro al cual pueda pertenecerse, haciendo lo contrario a lo que los otros esperan. La traición se produce cuando alguien en quien creíamos confiar nos juega una mala pasada, hablando mal de nosotros o fallando a un compromiso que había adquirido, y de traidores e ingratos está repleto el infierno. OPINA [email protected]