Más empresas fantasma en el domicilio fiscal de Araly Rodríguez. Notiver encontró otras dos. Eleazar Guerrero debió dar el visto bueno

Más empresas fantasma en el domicilio fiscal de Araly Rodríguez. Notiver encontró otras dos. Eleazar Guerrero debió dar el visto bueno

Los funcionarios de la Cuarta Transformación son tan torpes. A pesar de que el gobierno de Javier Duarte sufrió una debacle terrible debido al poco cuidado que tuvieron con las empresas fantasma, los de la 4T no cuidaron para nada las formas. Las empresas fantasma en el gobierno de Cuitláhuac García las hemos estado denunciando desde los primeros años de su gobierno. Los mismos encargados de esas empresas se dejaron entrevistar asegurando que quien empezaba a operar ese esquema era el primo hermano de Cuitláhuac García, Eleazar Guerrero. Nos comentaban en ese tiempo, que personal de este funcionario se puso en contacto con varios contratistas, algunos de ellos anotados en el padrón de proveedores del estado. El trato era prestar su registro y nombre comercial para la adjudicación de contratos; los que aceptaran se quedarían con un porcentaje mínimo de las ganancias. En su momento denunciamos a Elehnsa 3L Phrama, Proinher, Megabits Solutions, Grupo Desarrollador de Sistemas de Voz y Datos y Policarpo Carvajal Santamaría como persona física. Sobre el caso de Araly Rodríguez Vez, el periódico Notiver descubrió que la dirección fiscal que esta persona física anota, es la misma que usan dos empresas más. Nos referimos a la calle Huelva número 12 de la colonia Higueras en Xalapa. El esquema de las empresas fantasma ha sido utilizado para saquear al erario, para justificar millonarios contratos que al final no se realizan, y cuyo recurso va a parar a manos del funcionario corrupto.

El “Rey” Zambada es narco, pero no p3ndejo. Mientras López Obrador esté como presidente, negará haber entregado dinero para su campaña

Testificó Jesús Zambada, alias “El Rey”, hermano del Mayo Zambada, acaso el narcotraficante más inteligente de todos los tiempos; sexenios van, sexenios vienen y él es intocable. “El Rey” Zambada, quien ya conoce los rigores de la prisión, es testigo de cargo contra García Luna, al que acusa de haber recibido sobornos de parte del narcotráfico. Sin embargo, eso lo dice ahora que García Luna está en el banquillo de los acusados, porque años atrás, en julio de 2013, Jesús Zambada afirmó haber entregado dinero a Gabriel Regino para la campaña de López Obrador. Cuando el abogado de la defensa de García Luna le preguntó si había entregado 7 millones de dólares a Gabriel Regino, Jesús Zambada dijo que no. Dijo que él recordaba que a Regino le habían entregado dinero para una campaña, pero que no dijo que para la de López Obrador. Si en aquel entonces Gabriel Regino trabajaba para López Obrador, entonces, ¿para quién iba a ser el dinero? Por supuesto, “El Rey” sabe que estando López Obrador en el poder, conociendo lo vengativo que es y el rencor que guarda a quienes lo traicionan, lo mejor será negar lo que dijo anteriormente, aunque para ello su testimonio en contra de García Luna también se invalide.

Aumentan multas por injurias al presidente. Claro el presidente López Obrador sí puede injuriar desde las mañaneras a quien se le pegue la gana

La injuria en derecho penal se explica “como todo acto de un insulto de cualquier acción dirigida a una persona, perjudicando su reputación o autoestima. Es cualquier vulneración de derechos o referencias al dominio conductual de una persona”. Por supuesto, para algunos esta ley es anacrónica, pues en las redes sociales cualquiera, con perfil falso o real, puede insultar al presidente de México. Lo novedoso es que los diputados de Morena se hayan tomado la molestia de cuatriplicar las multas que conlleva este delito. Para que se aplique la multa, el injuriado deberá iniciar una querella. Ahora injuriar al presidente costará 4 mil 149 pesos; antes la multa era de 100 pesos. Por supuesto, a quien deberían aplicarle una sanción es al mismo presidente de México, ya que el actual no tiene empacho en injuriar a quien se le pegue la gana. Las injurias del presidente López Obrador abarcan desde ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, gobernadores, líderes de la oposición y, sobre todo, periodistas. Desde su tribuna en las mañaneras, López Obrador no ha dejado títere con cabeza. Maldice, agravia, difama, censura, señala y hasta amenaza. Pero para él no hay multas ni sanciones. No, hasta que deje el poder; entonces ya se verá.

Armando Ortiz                                    Twitter: @aortiz52                             @lbajopalabra