Mensaje del Gobernador Miguel Ángel Yunes Linares:
A partir de la aprobación de una reforma a la Ley de Protección a los Animales, que permite la celebración de vaquilladas y de peleas de gallos, se ha generado una fuerte polémica en la sociedad veracruzana.
Esta Reforma fue enviada al Ejecutivo del Estado para que en uso de sus facultades constitucionales, la promulgue o formule observaciones a la misma.
*En ambos casos, un Gobierno democrático como el nuestro, tiene la obligación de escuchar a la sociedad, tiene la obligación de tomar nota de lo que opinan los ciudadanos.
Este caso particularmente, reitero, ha sido objeto de una fuerte polémica.
Por una parte, un sector de la sociedad señala que las peleas de gallos particularmente, son parte de una tradición, y que esta tradición genera empleos, genera recursos que benefician a muchas familias. Señala lo mismo en el caso de las vaquilladas.
Este sector de la sociedad considera que no se debe exagerar la protección a los animales, a partir de prohibir este tipo de actividades.
Señala incluso que esto llevaría a que dejara de practicarse, a que dejara, en todo caso, en Veracruz se prohibiera la ganadería y otro tipo de actividades que tienen como propósito la crianza de animales para el consumo humano.
Otra parte importante de la sociedad se manifiesta en contra de estas actividades.
Señala que más allá de las tradiciones está el respeto a los animales, está el respeto a la naturaleza, al entorno ecológico del cual los animales forman parte sustantiva.
El Gobernador tomó la decisión de escuchar. Un gobierno democrático primero escucha, valora, pondera, equilibra y toma decisiones.
He escuchado la voz de unos y de otros; tengo mi propia opinión y la haré saber. Pero no es mi opinión la que debe determinar una decisión relevante como ésta. Tiene que ser la opinión de la sociedad.
He ponderado miles y miles de comunicaciones que me han llegado por distintas vías. He tomado nota de todo y he advertido que, en efecto, hay en la sociedad, cuando menos, dos sectores, unos en pro y otros en contra de que se promulgue esta Reforma a la Ley.
Quiero, en primer lugar, destacar que el Congreso del Estado actúa con absoluta autonomía, y lo celebro. Eso es parte del cambio democrático que promovimos.
Un Congreso que no esté sujeto a las decisiones del Ejecutivo. Un Congreso que se conduzca con plena libertad. Un Congreso que ejerza sus facultades constitucionales como las ejerce también el Ejecutivo a plenitud. Un Congreso que está obligado a respetar la opinión de los veracruzanos.
Yo considero que entre todos lo valores que están en juego, hay un valor superior en este momento, y así lo señalan muchos sectores de la sociedad: El valor de eliminar la violencia de la vida de Veracruz, de la vida cotidiana de Veracruz; la violencia en todas sus expresiones, fundamentalmente la violencia en contra de las personas.
Hoy, que vivimos un momento difícil en materia de seguridad, estamos obligados a hacer todos los esfuerzos, absolutamente todos, para que en Veracruz ya no se viva más una circunstancia de violencia.
Si la violencia se expresa cotidianamente en las diversiones, en las tradiciones, esa violencia, de alguna manera permea también en la conciencia social y se vuelve una práctica razonable.
Yo advierto que los niños, hoy, las nuevas generaciones, están a favor de la protección de los animales. Los niños y los jóvenes nos dan lecciones cotidianas de cómo preservar el entorno natural, el entorno ecológico, del cual los animales son parte sustantiva.
Tengo seis nietos, los seis aman a los animales, los seis conviven con la naturaleza, y los seis, cotidianamente, cuidan de sus animales, los aman. Y veo también, cómo los animales aman a mis nietos.
Y seguramente muchos niños, muchos jóvenes, y muchas familias, tendrán en casa un animal de acompañamiento.
Veo también que cada día en el mundo, las corrientes de protección a los animales y al entorno ecológico van avanzando de manera progresiva.
En nuestra Ley estaban prohibidas ya, las vaquilladas y las peleas de gallos; el Congreso tomó la decisión de volver a permitirlas y de esta manera dio un paso atrás en la protección de los animales.
El Gobernador del Estado Miguel Ángel Yunes Linares después de escuchar, ponderar, valorar, hoy ha tomado la decisión de vetar las reformas a la Ley que permiten las peleas de gallos y las vaquilladas; vetarlas para que el Congreso las vuelva a analizar, para que revisen las observaciones que he formulado y que se han entregado al Congreso del Estado.
Observaciones que contienen tanto elementos de ponderación, de lo que opina nuestra sociedad, como elementos jurídicos internacionales también, que rigen para todo México y que rigen para Veracruz.
Que el Congreso escuche la opinión de la sociedad, que tome una decisión sustentada y que si con la mayoría que la Constitución señala, vuelve a aprobarse esta Reforma, entonces sí se publique.
Yo pido a los veracruzanos que valoren esta decisión del Gobernador del Estado, que sepan que un buen gobernante decide después de escuchar. Que un buen gobernante sabe que no puede quedar bien con todos, pero que tiene que quedar bien, en primer lugar, con los valores que deben regular la vida social.
Y uno de estos valores sustantivos es la no violencia, la no violencia en contra de nadie pero tampoco en contra de los animales.
Por eso me siento realmente muy contento de anunciar el día de hoy que vetaré la Ley que permite en Veracruz las peleas de gallos y las vaquilladas.
A continuación firmaré el documento que se entregará en tiempo y forma al Congreso del Estado.
Este documento tendrá como consecuencia que el Congreso del Estado vuelva a analizar lo que aprobó, y si después de escuchar a la sociedad el Congreso reitera, con las dos terceras partes de los Diputados presentes, que es de aprobarse esta Reforma, entonces estaré obligado a publicarla.