“Todo poder excesivo dura poco.” – Lucio Anneo Séneca.
No existe duda de que, para el actual gobierno deformador, las mujeres y su unidad son el enemigo y el temor a vencer por el actual régimen.
La colocación de una valla frente a Palacio Nacional, es sin temor a equivocarse la muestra evidente del terror del presidente López.
Así como las Abuelas de Plaza de Mayo comenzaron en 1977 a socavar la dictadura militar argentina, estas mujeres reclamando su derecho a la sororidad, ponen en jaque a un personaje formado en un periodo donde sus voces eran por demás sojuzgadas.
De esta manera a un año del llamado del Colectivo “Las Brujas del Mar”, veracruzanas ellas, que retomaron voces de otras mujeres que pedían un alto a la violencia y a la intolerancia en su contra.
A ese gran llamado que paralizó al país, convocándolas a una protesta el 9 de marzo del 2020, y que solo pudo adormecer, más no vencer, una pandemia mundial.
De nueva cuenta la conmemoración del Día Internacional de la Mujer vuelve a poner en entredicho la arrogancia e indiferencia de un régimen machista, que hace culmen de su intolerancia, con el cobijo y protección de un senador aspirante a gobernador de Guerrero.
Con esa voz que desde el púlpito presidencial advertía “Ya chole”, el pasado 18 de febrero, cuando las y los reporteros le cuestionaron sobre la campaña “Rompe el Pacto” que se manifestaba en contra de la candidatura de Félix Salgado Macedonio.
Y a la que contestó con enojo y hasta rabia al justificar que él mismo sufrió ataques en el pasado e insistió que en época de elecciones hay rivales y linchamiento mediático. El mismo iluminado tropical, afirmó que las mujeres que denuncian tienen su derecho a la libertad, pero también el pueblo que Guerrero, que apoya a Salgado Macedonio.
Algo que solo él ve –en su Pejelandia-, pues el apoyo a Salgado ha sido en todo momento dirigido por su persona, como gran mesías salvador, que con su simple manto protector lo perdona todo y endereza jorobados.
Y mientras ha transcurrido un año de ese primer llamado las cosas se agravan para las féminas en México, en gran medida por la indiferencia institucional del Estado Mexicano.
Tan solo hasta el pasado 27 de enero de 2021, la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia Contra las Mujeres (Conavim) informaba que el 18% de los municipios en México concentraron la mayoría de los feminicidios ocurridos en nuestro país en 2020.
Al presentar los resultados del Grupo Interinstitucional de Estrategia contra Violencias (GIEV), la Conavim detalló que en todo 2020 se registraron en el país 940 feminicidios, dos menos que en 2019 (942).
A nivel nacional, el municipio con más feminicidios en 2020 fue Juárez, Chihuahua, con un total de 19 casos, seguido de Tijuana, Baja California (18 feminicidios) y Monterrey, Nuevo León (17). https://www.animalpolitico.com/2021/01/femincidios-mexico-resultados-estrategia-violencia-mujeres/
Ante el demoledor escenario, las mujeres de nueva cuenta ponen la voz por encima del intento institucional de acallarlas, pues lo que pretendió ser una valla calificada como “muro de paz”, se convirtió en un impresionante “antimonumento” desde donde no las pudieron silenciar.
Durante la noche del pasado 6 de marzo, un grupo de mujeres acudió al frente de Palacio Nacional y pintó los nombres de las víctimas de feminicidios en las vallas de tres metros de altura, convirtiendo el cerco metálico en centro de su protesta.
Las imágenes impactantes han dado la vuelta al mundo, dejando una vez más sin argumentos al gobierno deformador, evidenciando que las verdaderas actoras del cambio son y serán las mujeres, a las que desde este espacio les expresamos nuestro respeto y solidaridad.
Al tiempo.
Twitter: @LuisBaqueiro_mx