La “fiesta imperial” de Cuitláhuac y su parentela

*Inicia 2021 como término el 2020: con crímenes

*Vivir el día a día más allá de esperar años nuevos

 

EL CIERRE del 2020 demostró lo que es secreto a voces en la “Cuarta Transformación” que más bien deberían llamarse  “Cuarta Simulación”: que los actos que la enmarcan están encuadrados en la doblez o hipocresía, pues mientras por una parte aseguran una cosa, por la otra asumen posturas realmente deleznables y contrarias a lo que predican, como la fiesta de Fin de Año que el Gobernador Cuitláhuac García Jiménez ofreció a su parentela más cercana y algunos colaboradores en la llamada Casa Veracruz, la que amenazó con vender antes y al asumir el cargo por considerarla epicentro de la corrupción –pese a que la visitó en más de una ocasión en tiempos del duarthazgo, pero que ahora la utiliza para sentirse lo que la vida le negó antes de llegar al poder arrastrado por el Presidente Andrés Manuel López Obrador: un reyezuelo trasnochado que consume vinos caros, viandas propias de la realeza y un séquito de criados que los enviaría la reina Isabel de Inglaterra o los príncipes y monarcas de Europa, además de un ejército de policías que lo cuidan como la cosita más preciada de AMLO. Porque vea usted; el señor contrató para la ovípara cena al célebre banquetero de los grandes festejos de ex gobernantes del PRI y del PAN, Ángel Peralta (que no cobra nada barato) quien ofreció platillos en 3 tiempos: langosta a la mantequilla (cuyo orden tiene un costo por pieza de 1 mil 200 pesos), pierna de cerdo al horno y pavo a la ciruela, y como postre Pastel de Mil Hojas con salsa de frambuesa, por supuesto acompañado de vinos Vega Sicilia, los que tanto criticaba al ex Gobernador Fidel Herrera Beltrán, además de licores como whiskies etiqueta negra y verde. Se trató de una cena para 70 personas, y ahí están las fotos que ilustran la monárquica convivencia al estilo de los monarcas de Inglaterra, España o Bélgica, mientras AMLO, según dijo, cenaría romeritos y agua de frutas.

 

LO PEOR es que todos posaron para la foto sin el uso de cubrebocas y sin guardar la sana distancia a la que convoca fingidamente el Gobernador Cuitláhuac García y su alfil, el secretario de Salud, Roberto Ramos Alor, ya que aparecen amontonados como racimos de coyol, y fueron vecinos de la residencia oficial quienes confirmaron que los invitados a la cena de fin de año abandonaron la propiedad alrededor de las 3:30 a 4:00 de la madrugada custodiados por guaruras, así como unidades y elementos de la SSP que deberían estar cuidando a la ciudadanía que debe enfrentar, con sus propias uñas a la delincuencia, ya que mientras eso ocurría en Casa Veracruz el Estado cerraba Diciembre con 36 secuestros, 17 feminicidios y 102 asesinatos, pues como queda de manifiesto, la policía está para resguardar a los ahora todo poderosos funcionarios de la Cuatro T y sus “distinguidas” familias lo mismo que las unidades oficiales, mientras que el pueblo sigue sufriendo las consecuencias de una violencia incontrolada.

 

PORQUE LEA usted: solo en el primer día del año, esto es, el viernes primero de Enero ocurrieron en el Estado 8 asesinatos y otro siete muertos por diversas causas, y un sinfín de incendios de viviendas, robos a tiendas de conveniencia, a casa habitación, de autos, heridos y violación de una menor de 7 años, mientras el Gobernador y los suyos festejan con recursos del erario, muy parecido a lo que hacían Gobiernos en el pasado –que tanto critican y que le sirven de pretexto dizque para combatir la corrupción-, aun cuando el Presidente Andrés Manuel López Obrador asegura que no son lo mismo, y el mandatario Estatal en cada evento sigue repitiendo que no habrá impunidad, cual si fuera disco rayado, pero de los hechos suscitados, un día si y el otro también, casi cero detenidos y procesados, lo que ha inducido a la delincuencia a seguir haciendo de las suyas a sabiendas que nadie protege a la sociedad, y las actuales autoridades, simulando mesas de coordinación para la paz, han decidido dejar que los gobernados se rasquen con sus propias uñas en materia de seguridad.

 

HACE UNA semana en Astacinga, precisamente el Día de los nocentes, un comando armado asesinó a cuatro integrantes de una familia en la comunidad de Huapango, y entre los acribillados se encuentra una menor de 12 años. Todos, los ahora occisos, son familiares de Andrés Tzompaxtle Tecpile conocido como “El comandante Rafael” del Ejército Popular Revolucionario, y al gobernador García Jiménez y a la empistolada Fiscal General del Estado, Verónica Hernández Giadáns se le ocurrió decir que fue una venganza contra la familia –al parecer por un caso de violación ocurrido hace 7 años por un familiar de los ahora ejecutados, y que el responsable podría ser el padre de la menor que recien regreso de los Estados Unidos- , sin que haya detenidos aun cuando dicen tener esclarecidos los hechos. Con la versión que fue platicada por gente del pueblo se les ocurrió que pararían el escándalo, pero a decir verdad no existe un solo aprehendido por los hechos que confiese su participación. Si es verdad o mentira, ya tienen un sospechoso prófugo. Y nadie les cree porque los abusos se han tornado cotidianos, como la detención del ex alcalde de San Juan Evangelista, Abel Vázquez González a quien aprehendieron cuando le dio seguimiento a una patrulla de la policía municipal que había detenido a su hijo y un primo de este, y temeroso de que lo desaparecieran, como ha ocurrido en otras ocasiones con víctimas de detención decidió seguir a los uniformados, pero en un retén fue detenido con lujo de violencia por elementos de la Fuerza Civil que lo golpearon y luego, en el reporte, indicaron que la retención fue por resistencia al arresto y de pilón indicaron que llevaba consigo uva ametralladora, lo que resultó falso y un ardid policiaco para justificar sus acciones, lo que motivo que al día siguiente fuera liberado por un juez. Y de todo hay testimonios y notas, incluso de los muertos en Diciembre, y del primer día de este año que, por lo visto, amenaza ser peor que el 2020.

 

TAL VEZ el Gobernador y su ocurrente Fiscal deberían cambiar el discurso y mejor mantener silencio hasta tener pruebas contundentes que incriminen a las personas en actos delictivos, pues a decir verdad, aunque ellos no lo crean han ido perdiendo credibilidad, aunque no se descartaría una encuesta como las que manda a elaborar el Presidente Andrés Manuel López Obrador en donde aparece como el segundo mandatario más capaz del mundo, y en este caso Cuitláhuac haga lo propio y aparezca como el más listo, carismático, inteligente, capaz y con elevado liderazgo, solo por debajo de Cuauhtémoc Blanco Guerra, gobernante de Morelos. Por lo demás, Feliz inicio de año a todos, aunque nuestra mística es vivir el día sin preocuparnos de los años. OPINA [email protected]