Entre lo utópico y lo verdadero
Por Claudia Guerrero Martínez
24 de octubre del 2022
Informe Estrictamente Confidencial: Auditoría interna de la UV se ocultó y evidencia corrupción perpetrada por culpables a quienes hoy los premian
***La Junta de Gobierno de la Universidad Veracruzana supo sobre los vergonzosos resultados en la Auditoría Administrativa de la Dirección de Proyectos, Construcción y Mantenimiento en la UV.
***Siete años de impunidad y actos de corrupción de la titular de la Dirección de Proyectos, Construcción y Mantenimiento en la UV, Emilia Rodiles Justo.
En esta entrega, destaparemos una verdadera cloaca en la Universidad Veracruzana. Documentos sobre una auditoría administrativa confidencial fueron enviados a nuestra redacción por personal de la propia Dirección de Proyectos, Construcciones y Mantenimiento que se encuentran inconformes por los diversos actos de favoritismo a ciertos funcionarios, actos de corrupción diversos y desorden administrativo en todas sus áreas, de manera sistemática en esa dependencia en los últimos 7 años, desde que asumió el cargo la Arq. Emilia Rodiles Justo.
Cabe mencionar que el Informe de Resultados de la Auditoría Administrativa fue hecha por el despacho “RESA y Asociados SC, Contadores Públicos Certificados y Asesores de Negocios”, un despacho que ha trabajado por muchos años para la H. Junta de Gobierno de la Universidad Veracruzana y en marzo del 2021 realizó una investigación a la Dirección de Proyectos, Construcción y Mantenimiento en la UV, a cargo de Emilia Rodiles Justo, por las constantes quejas, denuncias y señalamientos por actos de corrupción en esta área tan sensible en la máxima casa de estudios.
Se debe destacar que esta investigación y sus resultados fueron filtrados a la investigada Emilia Rodiles Justo y su falta de cuidado posibilitó a los trabajadores inconformes obtener una copia de la misma; se sabe que este documento fue proporcionado a la Arq. Rodiles de manera informal por personal que laboraba en la Secretaría de Desarrollo Institucional, entonces a cargo de la Dra. Rebeca Hernández Arámburo, con el objeto de alertar a la mencionada Arquitecta sobre las observaciones que podrían castigar las nuevas autoridades de la UV y prepararse para cambiarlas, lo que hasta la fecha no ha sucedido ya que las condiciones arriba señaladas continúan dándose de la misma forma, no obstante haya transcurrido más de un año en que asumiera funciones la presente administración de Martín Aguilar Sánchez, quien se ha convertido en cómplice.
Este informe era para uso exclusivo de la Junta de Gobierno de la UV y con carácter confidencial, pero hay tantos actos de corrupción, que dentro del área responsable no quisieron ser cómplices del robo y nula operatividad en la máxima casa de estudios. En los primeros informes puntualiza: “El funcionamiento actual de la Dirección de Proyectos, Construcción y Mantenimiento (DPCM) es esencialmente empírico, sin ningún apego a estructura alguna. Gran parte del personal es improductivo, consideramos que esta es una de las causas principales de la ineficacia en sus funciones”.
Y el Informe Estrictamente Confidencial va más allá: “El resultado de nuestra evaluación sobre la suficiencia y capacidad de la plantilla laboral es Negativa. Determinando grandes deficiencias en especialización, experiencia y actitudes en general para los puestos asignados. No cuenta con las funciones por Departamento y por persona. Situación especial la constituyen el personal contenido en la Plantilla de la Dirección pero que en realidad trabajan para otra dependencia”.
En el mismo resultado cuestionan la capacidad de la directora Emilia Rodiles Justo respecto a la materia administrativa y organizacional considerando ser limitada, pues existe capacitación escasa y deficiente en materia administrativa, así como problemas en el control de proyectos, en la elaboración de expedientes de obra civil, nula utilización de bitácoras de obra y actualización de procesos constructivos, así como determinación de precios unitarios y deductiva.
Sobre el programa Anual de Obra, RESA y Asociados SC descubrió que con base a un análisis en los tiempos de autorización, puesta en marcha y fechas de conclusión, en la DPCM no existe un procedimiento específico para ello y sólo se realiza con base a los Artículos 264, fracción II del Estatuto General; del Reglamento de Obras de la UV sobre los Artículos 7, 8,9, 16 y 17.
Además, se detectaron aprobaciones de programas de forma tardía y justifica el incumplimiento de la entrega en tiempo y forma, sin planeación y sólo asignaba recursos, “siendo otra limitante de su cabal cumplimiento”, plantea RESA y Asociados SC.
En la ejecución de obras de la Dirección de Proyectos, Construcción y Mantenimiento, se detectaron actos de corrupción en el proceso y omisiones legales, con base a reportes técnicos, como la falta de comprobación de recursos entregado a los contratistas; Estimaciones no localizadas en el expediente y ser imposible determinar si la obra cumple con los alcances contratados en meta y calidad; detección de conceptos de obra excedentes y extraordinarios no incluidos en el catálogo original; no existen oficios de solicitud de autorización y convenios con precios, volúmenes y montos autorizados, así como expedientes de obra incompletos.
Se determina incumplimiento de tiempos de ejecución y presentación de estimaciones de obra, con base al contrato y tampoco se realizan retenciones o penalizaciones al contratista, evidenciando actos de corrupción y complicidad, bajo las órdenes de Emilia Rodiles Justo, teniendo el apoyo y protección de la anterior rectora Sara Ladrón de Guevara González.
Sobre el Padrón de Contratistas, éste presenta anomalías como la falta de evidencia fotográfica de los inmuebles donde albergan las empresas, tanto exterior, como interior, tampoco hay testimonio fotográfico de maquinaria, equipo de cómputo y de oficina, así como nula evidencia de haber realizado visitas a los domicilios de contratistas para validar la información. “No existe procedimiento por escrito para la conformación del padrón y sólo se limitan a las disposiciones del Reglamento de Obras, así como expedientes sin la información requerida en los formatos de inscripción y durante el 2019 y 2020 se detectaron 12 asignaciones directas que rebasaron los importes permitidos para ello, tan sólo en una muestra de 15 contratistas”, informa RESA y Asociados.
Lo interesante de esto, que en la muestra de 15 contratistas se ubicaron sus domicilios bajo el sistema de localización digital y dos tienen ubicación en casa habitación, una en un fraccionamiento habitacional y cinco la aplicación no localizó el domicilio, siendo estas empresas fantasmas.
Increíble, que al comprobar atraso en obras por cifras millonarias, en los Expedientes Técnicos de obra se detectaron faltantes de información de varios rubros como: Presupuestos de las propuestas concursantes, finiquitos de obra, fianzas por vicios ocultos, oficios de terminación de obras, notificaciones del superintendente de construcción, notificaciones de residencia de obra por parte de la DOP, avisos de inicio de obra, estimaciones de obra, números generadores y croquis de ubicación de volúmenes de obra ejecutada, nulo reporte fotográfico, bitácoras de obra y pruebas de laboratorio.
Tampoco había finiquito de obra, planos actualizados, actas de entrega-recepción del contratista, oficios de aceptación para ejecutar la obra y presentan fuera de norma las estimaciones de obra. Y dice el reporte: “Existe un gran descontrol en la integración de expedientes de obra, situación que influye negativamente en la eficiencia de la Dependencia”.
Lo vergonzoso es leer algunas conclusiones de RESA y Asociados: La ineficiencia en el desarrollo de las funciones de la Dirección de Proyectos, Construcciones y Mantenimientos es multifactorial y tiene varios y distintos orígenes, como las autoridades entran en pugna y conflicto por ausencia de autoridad hegemónica. La normatividad de obra de la UV está obsoleta y urgente actualización, pues se lleva de manera empírica o por costumbre. Nula estructura organizacional productiva y es negativa la capacidad de la plantilla de personal, con deficiencias en especialización, experiencia y actitudes en los puestos asignados.
Y lo peor, se detectó capacitación escasa y deficiente en materia administrativa, control de proyectos, elaboración de expedientes de obra civil, nula utilización de bitácoras de obra, actualización de procesos constructivos y ser urgente una depuración en la plantilla de trabajadores, pues resulta imposible dar buenos resultados con tantas irregularidades encontradas y RESA y Asociados da una alerta sobre la capacidad de Emilia Rodiles Justo en materia administrativa y organizacional considerándola limitada e indolente.
Con base a las graves conclusiones de Jorge Resa M., Contador Público Certificado y representante de RESA y Asociados SC, despacho que ha realizado infinidad de auditorías internas confidenciales por órdenes de la Junta de Gobierno de la UV, este documento fue entregado a la Dra. Rebeca Hernández Arámburo, quien debía presentar un informe y hasta el despido inmediato de Emilia Rodiles Justo y lo que hizo la titular de la Secretaría de Desarrollo Institucional fue darle una copia a Emilia Rodiles para tratar de enmendar la larga lista de anomalías administrativas, actos de corrupción, abusos de autoridad y complicidad. Actualmente, muchas de estas deficiencias consideradas como actos de corrupción no han sido arregladas, solventadas, ni les importa rectificarlas, pues Emilia Rodiles Justo sigue en el cargo sin ser molestada. Y lleva siete años en el mismo puesto, aunque RESA y Asociados reportó ser una incapaz, limitada e indolente.
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