Cuando nos referimos a evaluar, o a evaluación, lo primero que consideramos es una revisión, un resultado; y en términos concretos lo vinculamos a la educación, ¿cuanto aprendimos o aprendieron en un periodo escolar, mediante el resultado de un examen?, en lo personal o para nuestros hijos; la evaluación está vinculada a la educación, este es su significado inmediato.
La palabra como tal, deriva de evaluar, que a su vez proviene del francés evaluer, que significa “determinar el valor de algo”; de acuerdo a los estudiosos de este tema la evaluación es un juicio cuya finalidad es establecer la importancia de algo, tomando en consideración un conjunto de criterios y normas.
Se trata pues de un proceso de análisis estructurado y reflexivo ;( lo popular proviene de la percepción que muchas veces es contundente para bien o para mal) que nos permite emitir juicios de valor sobre el tema evaluado.
La evaluación nos sirve para clasificar elementos, pronosticar comportamientos, medir rendimientos, y analizar un desempeño o expresado llanamente en un resultado.
Pero técnicamente la debemos considerar como la evolución, como un proceso sistemático que se usa para determinar el mérito, el valor, el significado de un trabajo, la capacidad intelectual o física bajo un marco normativo, “la evaluación conduce a un juicio de valor”. (Wikipedia).
En la administración pública de nuestro país la evaluación se dio primero bajo el concepto de percepción, este esquema sigue vigente dentro de los ciudadanos, pero en la era post revolución ha evolucionado, asociado a dos conceptos: planeación y presupuesto.
Dándose los conceptos el presupuesto basado en resultados, los indicadores al desempeño y derivados de los nuevos valores de la planeación: los arboles de ideas y el MIR. (pilares de la planeación).
Un elemento que se une a este modelo de evaluación, se origina en la administración del presidente Miguel de la Madrid, bajo el lema: “De frente Combatir a la Corrupción” data desde los años ochenta, forma parte de la evaluación a la administración pública: “Combatir la Corrupción”.
Bajo este paradigma nacen las contralorías gubernamentales, hoy de la Función Pública, con su símil en las 32 entidades federativas.
Que definen a la evaluación de la siguiente manera:
La evaluación de la gestión gubernamental organiza diferentes elementos de gestión según su naturaleza con el propósito de hacer una valoración cuantitativa a través de indicadores, que dan cuenta sobre la capacidad de una institución de transformar sus insumos en resultados orientados al cumplimiento de sus objetivos estratégicos y metas institucionales. https://www.gob.mx/sfp
De acuerdo con los tratadistas de la administración pública, Ospina, Cunnil y Zaltsman, se puede afirmar que cualquier tipo de actividad o intervención gubernamental es susceptible de evaluación, proponen tres niveles; programas, organizaciones y funcionarios, o sea la evaluación incluye a los funcionarios.
De estos conceptos nace el programa que hoy se aplica:
Este es el Sistema de Evaluación al Desempeño (SED), que es un conjunto de resultados de la Gestión y del Presupuesto Basado en Resultados, con la vinculación en el ejercicio de los funcionarios como responsables de llevarlo a cabo.
A ello se le suma el combate a la corrupción, que forma parte de las políticas públicas de la actual administración, “No robaras, No mentiras, No traicionaras” el primero es parte de esta política.
La contraloría tiene muy claro estos objetivos consignados en la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal y Estatales, así como en sus reglamentos, inclusive existe una Comisión permanente de Contralores que mantienen un programa de trabajo conjunto para ser más eficientes y eficaces las herramientas de combate a la corrupción.
Lo malo es que la otra parte de estas políticas la Transparencia no se conoce, se encuentra fuera del mortal, ningún ciudadano sabe o conoce de la implantación de las evaluaciones menos de un sistema para estos fines; las contralorías tienen la particularidad a diferencia de las Auditorias de los Órganos de Fiscalización; de actuar en tiempo real.
En estos tiempos están analizando las declaraciones patrimoniales de los funcionarios, cuyos resultados la ciudadanía está lejos de saber.
La percepción acerca de la corrupción en nuestro país es menor o mayor que antes, usted tendrá su respuesta; según Transparencia Internacional; México paso a ocupar la posición 130 de 2019 a la 124 2020, entre 180 países evaluados, estando a la par de Bolivia, Kenia, Kirguistán y Pakistán, son peores, Gabón Mali y Rusia.
Según transparencia mexicana en su edición 2021 el índice de percepción es que México mantuvo su calificación de 31 puntos; donde cien es el óptimo.
En Veracruz ¿cuál es su percepción, sigue la corrupción, ha aumentado o ha disminuido?, habrá que ver los últimos hechos en los servicios de salud, o si los municipios ya no piden moches, o si las contrataciones se hacen sin influencia de los funcionarios estatales. ¿Ud. que percibe?
La percepción sí importa; es el sistema básico de Evaluación.
JFA.13.06.22. sinergiaenpromocion.com.mx