*Desde antes del CoVid19 incidencia ya era preocupante
*Haber nacido fue un error que pretendo corregir, porfían
LAS CAUSAS son variadas, aunque el Gobierno atribuye el incremento a la Pandemia de CoVid19 acaso para justificar la ausencia de programas encaminados a atender la salud mental de la población pero, por otra parte, es también responsabilidad del sector privado acercar a sus empleados los mecanismos de atención primaria para un mejor desempeño. Y es que si bien el Covid19 ha elevado padecimientos como depresión inducida por causas distintas, lo cierto es que de acuerdo al Instituto Nacional de Geografía y Estadística, los suicidios se han disparado en el Estado y País, algo que no es nuevo ya que al menos en el caso de Veracruz hay un alza significativa de 2017 al 2018 de 219 a 248 inmolaciones (13 por ciento más en ese lapso). Para los siguientes años la tendencia en el Estado fue al alza, ya que en 2019 y 2020 los registros pasaron de 264 a 283, una variación de 7.2 por ciento. El Inegi revela que en México del 2019 al 2020 el número de suicidios se incrementó en un 9 por ciento al pasar de 7 mil 225 a 7 mil 896 eventos. Sólo en el año 2020, mientras los registros de depresión disminuyeron en un 68 por ciento, los suicidios aumentaron 7.2 puntos porcentuales, por lo que de acuerdo al psicoterapeuta César Sinhue Gómez Sánchez, los padecimientos emocionales están rebasando la forma de vida que llevamos. Según el Boletín Epidemiológico de la Secretaría de Salud, en Veracruz 2019 cerró con 6 mil 885 casos de depresión, para el 2020 la cifra cayó en un 68 por ciento para llegar a 4 mil 87 casos en la Entidad, pero esos números no significaron que menos gente necesitara de atención psicológica, ya que contrastan con los aumentos de suicidios.
PERO, ¿CUÁLES son los indicadores de una persona que podría cometer suicidio, un acto que deja a familias destrozadas y con la zozobra de la forma en que pudieron intervenir para evitar que su ser querido desistiera de ponerle fin a su vida?. Insistimos: la pandemia vino a elevar los niveles de suicidio debido a casos de ansiedad, depresión y otros conflictos como el económico, lo que orilló a 7 mil 869 personas a quitarse la vida en 2020, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). Por ello los expertos recomiendan poner especial atención en personas que realizan cambios conductuales marcados, algunos acompañados con el inicio o incremento significativo de consumo de sustancias como drogas o alcohol, y esto es detectable debido a los cambios de conducta muy marcados pueden ir también en el sentido opuesto a la irritabilidad o negatividad, es decir, puede haber periodos de calma y tranquilidad repentinos, esto último cuando previamente se ha presentado gran agitación. En realidad, no se trata de una mejoría, por el contrario, puede constituir una señal de peligro de riesgo inminente.
LOS ESPECIALISTAS en conducta humana alerta en torno a personas que presenten un marcado deterioro en la conducta social, que se aíslen, rechacen tener contacto con otras personas y tengan expresiones negativas sobre el futuro, esto es, que muestren actitudes de desesperanza, hablando mal de sí mismos, expresándose mal de su vida, retraimiento, aislamiento de la familia, amigos o de la sociedad en general, viajes repentinos e inexplicables con la intención de alejarse. Según los expertos, algunas personas escriben notas sobre suicidio, lo expresan o tienen ideas suicidas, pero es importante saber que no todos lo hacen. A veces incluyen cartas de agradecimiento o de despedida. Sugieren que en individuos con personalidad impulsiva, es importante retirarles instrumentos con los que pudieran auto lastimarse, cuchillos, navajas, pastillas, etc. Por ello, dicen, hay que poner especial atención a individuos con una depresión mayor o algún otro trastorno mental no tratado como intensa angustia, desesperación, agresividad severa, insomnio incontrolable o irritabilidad extrema, o personas que acaban de recibir noticias de una enfermedad incurable (cáncer, padecimientos neurodegenerativos, etc.), con intenso dolor físico, mental o emocional.
EN ESE contexto, hay que poner especial atención a quienes, con las características anteriores comiencen a definir sus bienes, arreglar finanzas, hablar de a quién dejarían sus pertenencias, lo mismo que a personas que anteriormente tuvieron un intento de suicidio o tienen algún problema psiquiátrico presente. Lo peor, dicen psiquiatras, son los ambientes familiares disfuncionales ya que, también es un factor que influye: si hay agresividad, hostilidad, violencia, abuso, si en la misma familia ya hubo un suicidio o intentos de suicidio, etc. Y es que algunas personas atentan contra su vida cuando han tenido una pérdida muy significativa ya sea de algún ser querido, un hijo, el cónyuge, pérdida del trabajo, pobreza, problemas legales de grandes deudas y más.
EN VERACRUZ tan sólo el año pasado ocurrieron 289 suicidios (234 hombres y 55 mujeres), pero lo impactante de esta cifra es que la población joven es la que más se suicida, y un dato escalofriante: también hay niños de 10 años que se quitaron la vida, aun cuando la población de 20 a 24 años es la que tiene la mayor cifra de fallecimientos por suicidio (51), seguida del segmento de 15 a 19 años, con 32. También hay 14 casos confirmados de suicidios en niños y adolescentes de 10 a 14 años. Los demás casos registrados corresponden a otras edades. De las 289 muertes por suicidio, 248 fueron por ahorcamiento, 7 con arma de fuego, 21 envenenados y 18 de otro tipo. En la última encuesta del Inegi se recogió el dato de que el 32.5 por ciento de integrantes del hogar, de 12 años y más, presenta sentimientos de depresión, esto debe preocuparnos a todos.
CON TODO y los estudios recientes, lo cierto es que los verdaderos motivos en la mayoría de los suicidios son desconocidos, pues son muy pocos los suicidas que dejan “recado póstumo”. En este 2021 los suicidios continúan en la población menor de 25 años, y se han reportado casos que involucran a menores de edad y jóvenes. En ese contexto, Cristian Roberto Morales, representante de la Organización Panamericana de la Salud en México expresa su preocupación ante los aumentos del comportamiento suicida en niñas, niños y adolescentes durante el 2020 y 2021. En el caso de Veracruz, existe muchísima preocupación porque después de las pandemias y catástrofes, como inundaciones y huracanes, el número de suicidios se incrementó. Como fuera, el huracán “Grace” afectó 30 municipios, 3 de los cuales ya registran un alto índice de suicidios. Así las cosas. OPINA [email protected]