*Usó dron para llevar mejores tomas a sus lectores
*FGE se “ensaña” y busca presentarlo ante la FGR
LO QUE son las cosas. Con tantos asesinos, feminicidas, secuestradores, extorsionadores, asaltantes y violadores sueltos en las calles, la Fiscalía General del Estado enfoca sus baterías y busca aplicar todo el peso de la ley a un humilde reportero que tuvo la osadía de utilizar un dron para captar una mejor escena de un presunto crimen y, no solo eso, busca consignarlo ante la Fiscalía General de la República por alterar una escena delictiva por dizque violentar la Norma Oficial Mexicana NOM-107-SCT3-2019 que exige ciertos requisitos para operar un Sistema de Aeronave Pilotada a Distancia (RPAS), definición que incluye a esos aparatos. Por esa razón, el comunicador Marco Arango Arango, director de Foro Tuxpan –y colaboradores de otros medios- fue detenido desde el lunes pasado por agentes de la Policía Ministerial por alterar una escena que estaba bajo investigación en aquella ciudad, siendo puesto a disposición de la Fiscalía Regional a pesar de que diversos reporteros y medios de comunicación exigieron en un plantón que se respetara su labor profesional y que se actuara contra verdaderos delincuentes que pululan por toda la Entidad, cometiendo a diarios horrendos actos criminales, pero ninguna voz fue suficiente para que los “cumplidos guardianes del orden” lo llevaran a prisión. Ha sido por ello que reporteros e integrantes de organizaciones no gubernamentales exigen la liberación del periodista Arango, quien cometió el sacrilegio de utilizar un
dron para darle una mejor cobertura a los hechos ocurridos la tarde del pasado lunes en el bulevar Independencia, donde fue localizada una bolsa con restos, cerca del río que, que al final, se comprobó que eran de animales y no humanos, algo que el Gobierno de Cuitláhuac García Jiménez no desea que trascienda tratando de tapar el sol con un dedo, cuando Veracruz bajo su mando es un Estado fallido en materia de seguridad, empleo e inversión, y ahí están las fosas clandestinas encontradas en Ixtaczoquitlán, Alvarado, Coatzacoalcos, Tlapacoyan, y por donde le escarbe un poco, demostrando que la Entidad es el cementerio ilegal más grande del País.
POR ESA razón, la Asociación de Periodistas Independientes de Tuxpan AC (APITAC) se manifestó públicamente para exigir su liberación, al tiempo que dirigió un carta al insensible gobernador García Jiménez para solicitar su intervención, pues aseguran que el periodista respetó los lineamientos legales durante la recolección de información y su trasmisión, muy a pesar de que la Policía Ministerial –que solo detiene a reporteros indefensos, criminaliza a los muertos y agrede a uniformados pistola en mano-, y elementos de la Guardia Nacional lo pusieron a disposición dizque por haber violado los protocolos, presuntamente por invadir con el dron el espacio aéreo de la zona bajo custodia, y su detención quedó registrada a las 10:54 horas del lunes. Ya la organización internacional para la defensa del derecho a la libertad de expresión, Artículo 19, se unió a la exigencia para que liberen al periodista, y en ese tenor hizo un llamado a la Fiscalía General del Estado (FGE) para que se respete el derecho a la libertad de expresión y acceso a la información que tanto dice respetar el mandatario Estatal en el discurso, pero que en los hechos, al igual que su mentor, el Presidente Andrés Manuel López Obrador persigue y detesta.
LA ORGANIZACION, a través de redes sociales sostuvo: “Artículo 19 exige su liberación y llama a la @FGE_Veracruz (Fiscalía General del Estado) a que respete el derecho a la libertad de expresión y acceso a la información. Asimismo, pide a la @ceeaiv (Comisión Ejecutiva Estatal de Atención Integral a Víctimas) verificar los hechos y proceder conforme a sus funciones para asegurar la protección del periodista”, aunque esta última y la carabina de Ambrosio son lo mismo, pues temen que al intervenir en favor del comunicador el Gobierno del Estado les cancele sus sagrados salarios que es lo que realmente les importa. Por ello, no moverán un solo dedo en defensa del comunicador que solo deseaba llevar una mejor cobertura a sus lectores, ignorando que los gobiernos de MoReNa se asemejan más a los de Venezuela y Cuba –por citar algunas dictaduras- que a democracias de apertura, donde el derecho a la información y la libre expresión son elementales y respetadas por la ley.
EN ESE tenor, y ante la cerrazón del Gobierno del Estado y la Fiscalía Estatal, la organización Reporteros Sin Fronteras (RSF) también dirigió un mensaje a la FGE para demandarle garantizar la integridad física y psicológica del periodista –que a estas alturas ya recibió, de seguro, su calentadita con cierta advertencia para que de ahora en adelante cubra solo sociales-, y ponerlo en libertad de manera inmediata, considerando el ejercicio de su trabajo periodístico. Ha sido hasta este miércoles que la Comisión Estatal de Atención y Protección a Periodistas (CEAPP), ante la insistencia de organismos internacionales, informó que atiende el caso directamente ante la Fiscalía Regional de Tuxpan para saber las condiciones del comunicador y conocer la figura del delito que presuntamente cometió con el afán de obtener su libertad.
NO ES secreto que el uso de drones en México se encuentra regulado por la Norma Oficial Mexicana NOM-107-SCT3-2019, y que de acuerdo a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), se necesitan ciertos requisitos para operar un Sistema de Aeronave Pilotada a Distancia (RPAS), definición que incluye a los drones. Ciertamente, la ley precisa que ya sea para fines recreativos, cartografía, seguridad, investigación, publicidad o casos de emergencia, los drones deben estar debidamente registrados y clasificados, además de que la Dirección General de Aeronáutica Civil de la SCT establece la prohibición de operar esos aparatos en zonas consideradas como restringidas o peligrosas, y aprovechando la coyuntura, las autoridades hacen el señalamiento de que, presuntamente, el reportero invadió con el dron una zona restringida y bajo protocolo, lo que dio paso a su detención, pero aunque así fuera, el delito que habría cometido aparentemente no es grave, por lo que se espera que sea liberado al paso de las 48 horas de su detención que ya se cumplieron.
PORQUE NO es posible, insistimos, que habiendo tanto delincuente de alta peligrosidad suelto, las autoridades judiciales se enfoquen en un reportero que solo deseaba una mejor toma de una escena del crimen y que, por supuesto, al filmarla no la alteró para nada, sino que acaso pecó de vanidad al pretender llevarse una exclusiva por encima de sus colegas, aunque ello no debería ser motivo para mantenerlo encarcelado. Bueno, al menos hasta la redacción de esta entrega no había sido liberado. OPINA [email protected]